La tecnología E.M.I. (Electro Magnetic Impact) ofrece un rendimiento excepcional gracias a su concepto innovador y a la gran calidad de sus materiales.
Cada celda de tratamiento está calibrada de fábrica con gran precisión, en función de una curva de caudal y un nivel de dureza específico para cada modelo, con el fin de garantizar su eficacia.
El software de cálculo y selección Dropson permite determinar, según la directiva HS4, los modelos adaptados a sus aplicaciones. Nuestro concepto modular nos permite cubrir necesidades de caudales muy altos.
Desarrollada en colaboración con empresas de renombre internacional, nuestra tecnología ha sido específicamente diseñada para aplicaciones de producción de agua fría y agua caliente sanitaria.
Los descalcificadores electrónicos Dropson se fabrican en acero inoxidable 316L de calidad alimentaria. Su vida útil estimada es de más de 30 años.